En una de estas pequeñas salidas de fin de semana, nos subimos al mágico Galayar. El primer día nos vimos obligados a pernoctar cerca del aparcamiento, entre lo cansados que estábamos y alguna cerveza que nos tomamos de obligado cumplimiento con ciertos bares de la zona, era la mejor opción, quedarse y a la mañana siguiente subir. En la madrugada el cielo rompio a llorar y nosotros a mojarnos, mientras corríamos entre el sueño y la realidad buscando el resguardo del techo. Como si de un imán se tratase, todos los que por allí vivaqueábamos acudimos de todas las direcciones, a la llamada del resguardo, en el que apenas mas cabíamos. Por la mañana seguía lloviendo, que putada que al final no escalamos! Cierto es que nos levantamos como muchas otras veces en refugios y demás, envueltos en un buen ambiente, con el estandarte de al mal tiempo buena cara y por la cabeza se te pasa ser más sociable, aceptar que está lloviendo y piensas en volver al bar, donde seguro que algo curioso viviríamos. Fuera de estos pensamientos impuros esta la verdadera “Pachamama” que en esta ocasión nos brindo un día de sol ante todo pronóstico, las nubes se fueros y nuestros pasamiento se centraron en nuestras próximas escaladas.
Ya en el Galayar pudimos disfrutar de la compañía de algunos de nuestros amigos que allí se encontraban, como el Pepe el “Chumu”, el Gañote ,el Pi, Mar y muchos otros más…
En esta ocasión que subíamos a los Galayos, a diferencia de otras teníamos claro el objetivo para empezar nuestro periplo por las agujas, escalar en libre el artificial de la siempre respetada y muy mitificada vía Game del torreón.
Sin más dilataciones dejamos los pesados macutos y nos dispusimos a aproximar a la base de la vía. Echándolo a suertes logro que me toque escalar primero .tanto a Carlos como a mí nos gusta ir de primeros en los largos duros eso a veces supone un problema…En vías como las de Galayos nos permitimos el lujo de subir uno, limpia el largo y después sube el otro también de primero.
Vía GAME al Torreón
Muy recomendable, con una gran estética y calidad de movimiento, en torno al 7b según la guía de Desnivel de Tino Núñez y Carlos Arroyo, a nosotros nos pareció algo más fácil.
La vía comienza con un corto paso desplomado con el que entramos ya caliente a la fisura diagonal de manos, este tramo es fácil y muy disfruton, donde esta pierde su dirección original y comienza en vertical, se inician las dificultades de la vía. Se inicia con una fisura ya fina donde realizaremos algunos cerrojos en los estrechamientos, combinándolo con algunos cantitos fuera de la fisura y algún que otro lateral. Si entras cruzado a alguno de los pasos la dificultad puede ser mayor. En esta sección que es la clave está muy bien protegida con clavos, facilitando mucho la progresión. Al final la fisura se ciega y siguen dos buriles de frente por la vertical y sucia placa (en la vía original se usaban para pendulear e irse a la fisura de la izquierda)
Al no conocer previamente la vía, me tire hacia los buriles, asombrado de que aun no habían acabado las dificultades, y en ese intento superando el último clavo e intentando llegar al primer buril me caí y volé unos metros, siendo este muy limpio y sin ninguna repisa, el clavo actuó como debía…Ya bajando para quitar los friends y darle otro pegue, me di cuenta de que en libre tienes que hacer una travesía a izquierdas más abajo para llegar a la fisura ya fácil y en pocos metros a la reunión. Ya en el segundo pegue pude encadenar sin problemas…
